No sabras de mi

"Detrás de las escamas el ácido quema la piel..."

Zapato 3

Cierra los ojos, recuestate, respira y sueña, convierte en tu entorno en un lugar del cual no quieres salir, el cielo donde quieres estar, tu paraíso para olvidar... regalame un beso, una sonrisa, una caricia... deja que tus manos sean las que hablen, las que permitan volar... observa el humo esfumarse mientras yo estoy a tu lado.. observando el infinito que se manifiesta en tu rostro y así, cobrar las fuerzas necesarias para atreverme a besarte... dicen que el amor es sangre, que el tiempo es la cura... pero la ausencia como manifiesta ese sentir tan grande que no te permite dejar de amar a aquella persona que viste solo una vez.

Tu no me ves, pero sabes que siempre estaré...tus labios son el veneno que siempre he anhelado, veneno del cual quiero nutrirme para poder seguir existiendo...posees el motor que me hace seguir adelante pero que a su vez, me convierte en ese ser inanimado sin sentido marioneta de aquellos que se aprovechan de mi vulnerabilidad...un secreto muy bien guardado, del cual, solo tu posees la llave.


Me encierro en mi silencio, te sigo observando, deseando... el simple hecho de pensarte me hace libre, pero el no poseerte me vuelve miserable...una vida de engaños he de tener, un corazón seco he de sentir y unas lágrimas seguro saldrán, pero tu recuerdo me hace bien, me hace mal...te convertiste en mi vicio y mi virtud.


Sigue recostada, no abras los ojos, se perdería la ilusión...veo que muerdes tus labios...espero ser yo quien se encuentre en tu mente...suspiras...te observo...te anhelo... el silencio se hace presente, mientras que en mi cabeza a gritos te invoco...se que nunca me escucharas..se que nunca voltearas a verme, se que para ti no existo...por eso persisto en mi búsqueda...algún día sabrás de mi...así sea el día en que veas los ángeles brillar.


Enciendo un cigarrillo y el humo se convierte en la ventana del olvido... admiro tu belleza...deseo besarte mas no puedo, se que no debo...se perdería la ilusión...la muerte se sienta a mi lado, me recuerda que es hora de volver...suavemente acaricio tu cara y susurrando a tu oído, te digo adiós...


Un amor maldito, un amor imposible, un amor infinito...te despiertas, piensas que todo fue un sueño y que aquel ser desconocido que te visita en tus sueños, no existe...pero en el fondo...sabes que por algún motivo, siempre quieres dormir y volver a soñar con el.


El silencio es el lenguaje de los amantes olvidados, donde a gritos intentan comunicarse...



Fotografía y Texto © Ignacio Lucart/IALC 

Un principio, un final.

En silencio un niño anda por un camino, solo, sin nada que pensar, solamente con un norte al cual desea llegar... abismos a los lados, sin arboles ni fauna, simplemente el camino y el... sigue andando.. algunas veces se cae, otras duerme... y en sus sueños observa su destino, un lugar donde el azul del cielo nunca cae, el aire es puro y limpio, a su alrededor de el todo esta bien y consigue su paz... pero todo esto termina cuando llega el momento de despertar y con una lágrima por su mejilla decide continuar su andar..

De pronto observa que en su camino no esta solo, observa otros niños y niñas que caminan delante de el... los alcanza y algunos lo ignoran, otros simplemente observan y continúan su andar, pero algunos se detienen y deciden acompañarlo.. esa compañía se siente placentera, el niño no anda solo.

Caminando va el niño acompañado por su nuevos amigos, amigos que en la vía, algunos deciden separarse y seguir su camino con otros niños, otros se quedan atrás y del resto que queda, algunos deciden traicionar al niño, otros deciden engañarlo, otros deciden jugar con su inocencia y destruyen su corazón, algunos solo lo usan para su beneficio, pero unos pocos, deciden ayudarlo a levantarse, acomodar su corazón y restaurar su inocencia continuando su duro andar.

El camino se torna amigable, los abismos no son tan grandes, el cielo cambia de color, el niño ya no es un niño... una persona aparece en su camino, el ya no niño la observa... siente algo que nunca había sentido... cree estar enamorado... esa persona se percata de el ya no niño y lo acepta... el camino se hace mas angosto debido que ahora caminan uno al lado del otro... todo mejora, el camino es duro pero ambos logran superar los obstáculos, se conocen, se aman, se vuelven uno solo.

De pronto el ya no niño se siente extraño, desplazado, olvidado... su compañera ha decidido continuar su camino a solas, recordando desastres de su pasado y abandona a el ya no niño... el cual lo acepta y sus sentimientos oscuros se tornan y su corazón de piedra convertido por su compañera en un corazón que poseía el latir propio del ser humano que siente, perdona y sobre todo, ama, regresa a su estado natural, lleno de traiciones y desencantos... el sigue su andar soñando con su norte, un norte que al parecer no lo conduce este camino sino, ese abismo al cual siempre le temió y que solo alcanzara si decide saltar al mas allá...otra lágrima recorre su rostro dejando una cicatriz mas en su corazón y decide lanzarse al vació... al estar en el aire, el cielo se empieza a tornar azul como en sus sueños, la paz aparece, y por mucho tiempo una sonrisa aparece en su rostro... ya no esta solo, consiguió su norte, el frió ya no lo cobija, la soledad no lo acompaña y el silencio ya no le habla, su norte alcanzo y la felicidad real conoció..

Su principio fue su final, su final fue su principio, su norte siempre le acompaño pero su entorno lo destruyo... las cicatrices que la vida te da, mas fuerte te volverán.

Fotografía y Texto © Ignacio Lucart/IALC